2oo pulsaciones por minuto

Él lo que quería era correr y no parar... Recorrer kilómetros y kilómetros solo con sus pies y a toda velocidad.

¿Para llegar a dónde?

No, la cuestión no era el dónde. Él quería correr para sentirse libre, el destino ya lo decidiría por el camino.

Hoy me apetece hacer algo distinto...

















... creo que me iré a la playa a intentar tocar la Luna con los dedos.